
UN LUGAR ÚNICO LLENO DE HISTORIA
El sitio que pertenece al período maya clásico ubicado en la región de los lagos, a pocos kilómetros de la Costa Maya, está a sólo 50 minutos de la Costa Maya para llegar al sitio arqueológico de Chacchoben, rodeado de selva y lagunas con una gran diversidad de flora y fauna. No hay evidencias que nos permitan saber el nombre original del lugar en el período prehispánico, hoy se llama “Chacchoben”. Significa en idioma maya “Lugar del maíz rojo”, nombre de la comunidad maya moderna que incluye en su territorio el sitio arqueológico. En 1972, Peter Harrison fue el primer arqueólogo profesional que visitó el sitio, hizo los primeros mapas e informó de Chacchoben al gobierno mexicano. En junio de 1994, el Instituto Nacional de Historia y Antropología (INAH) comenzó la primera restauración descubriendo los primeros secretos de este asentamiento maya, para finalmente abrirlo al público en 2002.
HOY. UN SITIO PARA PROTEGER
Hoy puede visitar el lugar disfrutando de un paseo por la jungla observando templos mayas rodeados por diferentes tipos de árboles, palmas de corozo, árboles de zapote y diferentes tipos de orquídeas. Recorrer este sitio lo invita a relajarse y sentir la armonía entre la naturaleza y la historia. Esta ciudad después de su abandono fue rehabitada en el año 1929 gracias a la actividad de extracción de chicle (chicle) que es la resina del árbol de zapote, algunos colonos se quedaron por mucho tiempo y otros permanecieron hasta hoy. Poco a poco, el campamento de chiclero se convirtió en una ciudad y fue nombrado oficialmente como tal en 1939. La mayoría de las poblaciones son de origen maya y se conservan muchas de las tradiciones de nuestros antepasados.